Durante estas semanas, muchas personas llegan a fin de año totalmente agotados y con ciertos síntomas que afectan su estado de ánimo y ganas de hacer las cosas. Problemas para dormir bien y de concentración, agobio, mayor irritabilidad, menos tolerancia, fatiga y presencia de algunos dolores físicos, son solo algunas de las condiciones que muchos describen sentir.
Según los especialistas, esta sintomatología puede atribuirse al llamado “síndrome de diciembre”, el cual se produce en un mes donde el estrés aumenta profundamente, debido a la obligación de asumir distintas actividades, tanto laborales como personales.
“Es un desgaste psicológico y físico por el exceso de tareas que quedan por resolver y por el aumento de compromisos familiares y de trabajo, además de los gastos de fin de año, la planificación de las vacaciones, los cierres de colegio o exámenes universitarios. Es una acumulación de cosas que sin duda afecta nuestro sistema”, explica Karen Mella, psicóloga y jefa disciplinar del área de Desarrollo Social del Instituto Profesional IACC.
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¿Cómo podemos evitar este desgaste y llegar a diciembre más preparados?
Karen Mella de IACC explica que, si bien el cansancio de fin de año es prácticamente inevitable, existen algunas medidas que podemos tomar para evitar un desgaste severo.
En este sentido, entrega algunas recomendaciones para abordarlo de mejor manera y prepararnos para enfrentarlo con más calma y menos agobio:
- Jerarquizar nuestra lista de tareas y temas pendientes, priorizando aquello que es fundamental.
- No agregar presión innecesaria con tareas que pueden dejarse para más adelante.
- No generar falsas expectativas. Es sumamente importante hacernos conscientes del tiempo que poseemos y de lo que podemos realizar en dichos espacios, por lo que es clave que identifiques cuáles son tus prioridades y, a partir de ello, establece un orden y define qué harás.
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Establece ventanas de descanso de al menos 15 minutos entre una actividad y otra, eso te ayudará a bajar tus tensiones y poder ordenar las ideas para la actividad o tarea siguiente.
- Siempre es importante reconocer ¿cómo me estoy sintiendo? Eso te ayudará a identificar emociones y generar un autocontrol respecto de las respuestas que se generan frente al estrés, no tensionando a las personas que me rodean y generando un estrés familiar por las actividades de finalización de año.
- Y como último consejo, es recomendable que tomes estas fechas como una actividad de recreación, de unión familiar y de renacimiento, velando por iniciar con buenas energías y positividad el año que viene. Esto te ayudará, sin duda a comenzar, un 2024 renovado y sin el estrés acumulado de fin de año.
Finalmente, agrega que muchas veces este síndrome puede agravar ciertas afecciones derivadas del estrés crónico, como el consumo de drogas o condiciones cardiacas, “por lo que si las personas ven que los síntomas o conductas se hacen permanente o si su duración se prolonga por mucho tiempo, es fundamental acudir por atención médica o con un especialista que evalúe como actuar”.