Este miércoles 31 de diciembre, el mundo entero dará la bienvenida al Año Nuevo 2026.
Sin embargo, miles de personas afrontan las fiestas de distinta manera. Para muchos, las fiestas de fin de año pueden resurgir sentimientos de melancolía, tristeza, soledad e incluso vacío.
“Existe una presión social muy fuerte de estar rodeado y ser feliz en estas fechas. Cuando alguien está solo, esa presión se vuelve más evidente”, afirmó un especialista a Infobae.
Esto, explicando que el cierre de año aflora duelos y metas no cumplidas.
Por este motivo, es importante visibilizar la importancia del autocuidado y validación de nuestras propias emociones, sin la presión de cumplir con expectativas.
Nueve recomendaciones para sobrellevar estas fechas
A continuación, descubre los consejos de los distintos especialistas consultados, para poder afrontar la soledad en Año Nuevo.
- Reconocer y aceptar las emociones. La importancia de identificar y validar las propias emociones. “Sentirse solo no es un fracaso personal. Reconocerlo es el primer paso para abordarlo sin culpa”, sostuvieron.
- Buscar conexiones reales, aunque sean mínimas. No se trata de grandes fiestas, sino de la calidad de los vínculos. “Un mensaje sincero o una llamada valen más que una reunión sin conexión emocional”.
- Elegir activamente cómo pasar la noche. Planear la velada según las preferencias personales. “Una cena especial, escribir, ver una película o crear un ritual propio pueden dar sentido a la fecha”, afirmó.
- Comunicar las propias necesidades. Expresar lo que se siente y necesita. “Pedir compañía o simplemente compartir el propio estado ayuda a reducir el aislamiento emocional, aunque la persona permanezca sola físicamente”.
- Establecer límites y cuestionar las expectativas externas. Definir límites frente a reuniones o compromisos sociales es fundamental. “No asistir por miedo a quedar afuera no debe vivirse como un fracaso, sino como una forma de autocuidado”.
- Reformular la interpretación de la soledad. Cambiar el enfoque de “estar solo” a “estar conmigo mismo” resignifica el tiempo en soledad como un espacio de autoconocimiento.
- Aprovechar la ocasión para la autoevaluación. Transformar la fecha en una oportunidad para reflexionar. “Escribir, registrar emociones o crear rituales personales permite darle significado a la experiencia sin presionarse a cerrar ciclos”.
- Conectar con los valores propios. Identificar lo que da sentido a la vida personal. “Preguntarse qué es importante y cómo se quiere relacionar uno con los demás ayuda a orientar las acciones hacia el bienestar”.
- Desdramatizar la fecha. Restar dramatismo al 31 de diciembre. “Se trata de un día más del calendario; la verdadera celebración es la que se construye cotidianamente”.
