Martín de los Santos permanece en la cárcel Ahmenon Lemos Dantas, Brasil, desde el pasado 2 de julio.
El empresario, está en calidad de imputado tras la agresión de Guillermo Oyarzún (70) y se encuentra a la espera de su extradición a Chile.
Sin embargo, mientras Martín continúa encerrado en la ciudad de Cuiabá, se le acusó de otro delito en nuestro país.
Acusan de estafa y deuda a Martín de los Santos
Este miércoles, José Tomás expuso un nuevo escándalo protagonizado por el agresor de Oyarzún.
A través de una conversación con Chilevisión, el hombre señaló que fue estafado por Martín, tras una fraudulenta venta de parcelas en Pichilemu.
José Tomás relató que conoce al imputado desde hace 10 años y que consolidaron una amistad en medio de la pandemia.
De esta manera, Martín le habría ofrecido la venta mediante su inmobiliaria.
«Todo resultó súper bien, fue netamente de confianza, todo de palabra. Hoy tengo mi rol y está inscrita a mi nombre. No había razones para desconfiar hasta ese momento», relató el hombre.
José Tomás reveló haberle comprado una tiny house, tan sólo un día antes de la golpiza al conserje a mediados de mayo.
«Yo siempre sentí que podía confiar en él, a mí nunca me había fallado, siempre pensé que iba a tener mi casa y cumplir mi sueño de vivir en Pichilemu, que siempre lo deseé con todo mi corazón», agregó.
Nueva denuncia en su contra
Así, la presunta víctima aseguró haberle depositado $7 millones para los materiales de la vivienda.
«Nunca se entregó ningún presupuesto ni avance. Luego de un mes me di cuenta de que no estaba respondiendo como debía, le pedí de vuelta mi dinero y él se negó», lanzó José Tomás.
De esta manera, se querelló en su contra por el delito de estafa.
El abogado querellante de José Tomás detalló que Martín apuntó a un supuesto proveedor de los materiales.
Asimismo, señaló que el imputado pudo haber escapado del país con ese dinero.
«Martín había tenido unas conversaciones preliminares con el proveedor, pero esta persona no cedió a formar este acuerdo, pero igualmente ofreció este servicio a José Tomás (…). Presumimos que con los $7 millones se escapó de Chile por los otros líos judiciales que tiene», declaró.