La Navidad llegó de manera anticipada a los estudios de «Mundos Opuestos».
Lo comenzó como una visita alegre del Viejito Pascuero, terminó en uno de los momentos más íntimos y dolorosos de la temporada.
Leonardo Vallana, popularmente conocido como «Princeso», quebró su coraza de participante polémico para revelar una dura realidad familiar.
Un deseo que silenció a la casona de Mundos Opuestos
Frente a la mirada de sus compañeros, Princeso aprovechó la presencia de Papá Noel para pedir un regalo que no era material: un mensaje para su hijo de seis años.
“Viejito, ¿te puedo pedir un favor? Quiero pedirte si le puedes mandar un saludo a mi hijo, porque yo nunca he pasado una Navidad con él”, confesó el participante.
«Me voy a poner las pilas como papá»
Al consultarle sobre el motivo de esta distancia, el participante de Mundos Opuestos fue honesto y apuntó a los conflictos personales con la madre del menor.
Entre lágrimas, envió un mensaje directo a su hijo y una sentida disculpa por las promesas incumplidas.
“Lo amo mucho, que me disculpe por no estar junto a él, que me disculpe por hacerlo llorar cuando me dice que yo nunca lo voy a ver. Voy a ponerme las pilas y voy a estar junto a él”, prometió frente a las cámaras.
Además, hizo un llamado público a su expareja:
“Si la Cari está escuchando esto, que me dé una oportunidad como padre, porque los problemas hay que dejarlos de lado”.
El pacto con Daúd Gazale
Tras el emotivo momento, el ex futbolista Daúd Gazale se acercó a Princeso para darle apoyo y, sobre todo, exigirle un compromiso real fuera del encierro.
“Tenís que luchar por tu hijo”, le lanzó el deportista.
Vallana, decidido, trazó su plan de acción para el día que recupere su libertad:
“Saliendo de acá me voy a tomar el avión a Chile, me voy a bajar en el aeropuerto y voy a tomar un bus a Rancagua”, aseguró.
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