Durante esta semana se retomó el polémico juicio en Francia en contra del chileno Nicolás Zepeda, quien es imputado por el asesinato y desaparición a su expareja, Narumi Kurosaki.
En este sentido, un tenso momento se vivió cuando el fiscal Étienne Manteaux le preguntó al ingeniero de 33 años por qué sus hermanas no lo apoyaron durante el proceso.
“Se consideró que para este tipo de testimonio, sobre mi carácter, el testimonio de mis padres y de mi amigo Alexandre era suficiente. Pero cuento con el apoyo de mis hermanas, tengo noticias de ellas”, reveló Zepeda.
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Nicolás Zepeda se quebró en llanto y aseguró inocencia
“Realmente es hora de decirlo todo, señor Zepeda. Durante este juicio, usted hizo seis nuevas revelaciones, seis realidades ferozmente negadas durante siete años”, le replicó el fiscal al ingeniero.
En tanto, el perito entregó varias pruebas ante la nula respuesta de Nicolás.
“Esta es la prueba central de que usted tomó posesión del celular de Narumi”, sentenció el fiscal.
Del mismo modo, Manteaux insistió y le preguntó directamente al chileno: “¿por qué mentir si no tenemos nada que reprocharnos? y el chileno contestó que “todos mentimos. En este caso me invadió el miedo, porque vi que querían culparme por algo que no hice. No tengo ninguna relación con esta desaparición”.
Por último y luego de finalizar la jornada del interrogatorio, el abogado de Zepeda le consultó sobre cómo se sentía y fue en ese momento que Nicolás se quebró en llanto marcando un hito durante el proceso:
“Me vuelve loco saber que no se hizo todo. No podemos saber qué pasó porque están concentrados en mí, están muy concentrados en mí”, expresó de manera exaltada y entre lágrimas. Llorando y gritando, Nicolás Zepeda exclamó: “¡Yo no la maté!”, manifestó el ingeniero según consignó Radio ADN.