Una violenta pelea registrada a plena luz del día en la Plaza de Armas de Melipilla terminó con la trágica muerte de un joven estudiante de 17 años. El hecho ocurrió el pasado viernes, cuando la víctima fue atacada con un arma cortopunzante.
A menos de una semana del crimen, un nuevo y conmocionante antecedente marcó el curso de la investigación: la madre de los presuntos autores fue quien los delató ante Carabineros.
Madre testigo del horror del joven estudiante
Durante la audiencia de formalización, se reveló que la mujer, madre de los dos adolescentes imputados (15 y 17 años), presenció actitudes sospechosas de sus hijos poco después del ataque.
Según su testimonio, ambos llegaron a casa, se cambiaron apresuradamente de ropa y se jactaban de lo ocurrido en la plaza.
La madre recibió minutos después un video del ataque por WhatsApp, donde logró identificar a sus hijos participando activamente de la agresión. Con esa información acudió de inmediato a la Plaza de Armas para alertar a Carabineros.
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“En ese instante, les digo que fueron mis hijos los que le habían quitado la vida a este joven y les solicité si podía prestar declaración voluntaria”, declaró ante la justicia.
“Mis hijos agredían de manera brutal a un joven de sexo masculino, donde le propinaban reiteradas estocadas, al parecer con un cuchillo, y golpes de pie y puños”, dijo ante el tribunal.
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Además, reconoció que intentó persuadir a sus hijos para que se entregaran voluntariamente, enviándoles un mensaje por WhatsApp con el video de la agresión:
“Les dije que se mandaron la media cagá y que el cabro se había muerto”, relató. La respuesta de uno de ellos fue: “Me voy, mamá”.
Detención y audio incriminatorio
Ambos jóvenes fueron detenidos por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) durante el fin de semana. Paralelamente, comenzó a circular un audio impactante de uno de los implicados, quien relata el crimen con frialdad:
“Lo pescamos a puñaladas. Le plantamos un cuchillazo. Quedó sangrando el gil culiao en la plaza”.
La Fiscalía formalizó cargos por homicidio calificado, mientras que los adolescentes quedaron en internación provisoria mientras avanza la investigación del joven estudiante fallecido.
