Canal 13
La cuarta eliminación en Mundos Opuestos dejó una inesperada baja: Yuhui fue derrotado por Marlen en una prueba de precisión y azar que sorprendió a todos los participantes.
“¡Por Lorenzo!”, gritó la showoman entre lágrimas tras ganar el duelo, mientras el querido cocinero se despidió emocionado:
“Aquí no pude ser como soy…”.
¿Amor real o estrategia en Mundos Opuestos?
Uno de los momentos más comentados de la noche fue el acercamiento entre Alan y Eskarcita, quienes durmieron juntos abrazados.
“Un día se odian, otro se aman”, comentó Vale. Por su parte, Evelyn aseguró que cree en el vínculo: “Creo que realmente le gusta”.
Eskarcita, sin embargo, se mostró cautelosa: “No me quiero hacer expectativas”, dijo ante las especulaciones de sus compañeros.
Emocionada hasta las lágrimas, Evelyn se abrió con sus compañeros: “Toda mi vida he luchado por encajar”. En medio del momento, Joche intentó levantarle el ánimo con una frase inesperada: “¡Y si querés tocarnos el c…, hacelo!”, generando risas entre todos.
Chilota lee el futuro
Chilota sorprendió al revelar su talento para leer las líneas de la mano. A Diego le dijo que tiene un alma que lo acompaña, mientras que a Eskarcita le predijo una muerte a los 60 años en un accidente.
“No quiero morir joven”, respondió ella, entre risas y algo de preocupación durante el capítulo del reality de Canal 13, Mundos Opuestos.
Un reto con postres “asquerosos” terminó en desastre cuando Alan rompió las reglas y Luis lo siguió, provocando que se anulara el premio para todos. “Por un h… cag… todos”, explotó Princeso. Aun así, varios celebraron que el “premio” no llegara a manos del influencer.
Atenea impone castigo
La justicia llegó a la casa. Tras descubrirse el robo de alimentos por parte de Luis y Daúd, Atenea anunció una sanción directa: ambos deberán enfrentarse en un duelo, y el perdedor quedará automáticamente nominado.
“Voy a ser aleccionadora”, advirtió.
Por otra parte, Ignacia cree que Diego es menos “inexperto” de lo que aparenta, aunque lo tilda de lento. Más tarde, ambos compartieron un beso y hablaron sobre su conexión.
“Somos tan distintos que nos equilibramos”, coincidieron.
Previo al duelo de eliminación, Daúd ayudó a Marlen a rezar. “Padre mío, me pongo en tu presencia…”, le enseñó el exfutbolista, mostrando una faceta más íntima y espiritual de ambos participantes.
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