Durante la mañana se vivió una emotiva jornada en el matinal «Mucho Gusto«. Esto porque uno de los temas que protagonizó el programa abordaba la enfermedad de Alzheimer. Allí se abordaron las complejidades que esta provoca en la familia y el afectado, sobre todo en el contexto actual con la pandemia.
Para ello, se invitó a la actriz Paulina Urrutia, que compartió su testimonio. Urrutia tiene una nueva vida desde hace siete años cuando diagnosticaron a su marido, el periodista Augusto Góngora, con la enfermedad.
La ex ministra de Culturas, contó que entre las graves consecuencias del Alzheimer, se suma también las derivadas por la crisis sanitaria. Estas afectan a su esposo y sus síntomas, principalmente por los cambios en la rutina.
Sin embargo, en medio del relato la actriz dedicó emotivas palabras expresando su amor por su marido.
«Yo siento que me ama», dijo entre lagrimas. Y luego de unos segundos, comenzó a relatar su vida al lado de Augusto.
«Yo soy la mujer más feliz del mundo cuando llega la noche y yo puedo acostarme junto al Augusto, tomarle la mano y si se angustia, si se desvela decirle: ‘Tú eres Augusto Góngora, estás en tu casa y estás con la Pauli’ y que él me diga ‘ah, eso es bueno‘. No soy yo, será mi voz… es calmar a un otro, que cuente contigo, es yo poder contar con él», contó en el matinal, notoriamente emocionada.
«No importa que él no se acuerde de mí. Yo no estoy enamorada del Augusto de antes, yo no estoy pensando todo el día en ‘ay, el August, el Show de los Libros, de Cine Video’, no. Yo estoy enamorada de él ahora. No estoy pensando en el otro, el de la Paulina, el tincudo, incluso en el de ese reportaje… ya Augusto no está así y uno puede amar así porque todos nos vamos a deteriorar, todos vamos a morir», agregó.
Finalmente, hizo una reflexión importante. Una que puede ayudar tanto para las familias que están pasando por un difícil momento debido a esta enfermedad, como al resto de las personas.
«Nosotros tenemos que aprender; a amar no solamente en las luces, los triunfos, las grandes conquistas que hace el ser humano, sino también la precariedad, la debilidad, la falla, el error. Tenemos que ser capaces como humanidad de aprender a amar», finalizó Paulina Urrutia en el programa.